En la rueda del hámster
CENTRO CRISTIANO Y MISIONERO ETERNIDAD
sᴇʀɪᴇ ғᴏᴛᴏᴍᴇɴsᴀᴊᴇs
18/ᴇɴ ʟᴀ ʀᴜᴇᴅᴀ ᴅᴇʟ ʜᴀ́ᴍsᴛᴇʀ
Lectura: 1ª Co. 12:14-27 “Marta se preocupaba con muchos quehaceres… Afanada y turbada estás con muchas cosas” (Lc. 10:40-41)
▪️ Ward Shelley y Alex Schweder, dos artistas convivieron durante 10 días en una rueda de hámster humana, equipada de una manera magistral. Esta creación artística, de 7,6 m. de diámetro llamada “en órbita”, está en Brooklyn, nos ilustra lo que muchas veces puede llegar a ser nuestra vida activa; aún en temas espirituales.
La iglesia de Corinto disfrutaba de muchos dones , pero el “Síndrome de ministerialitis desmembrada”, o sea hiperministerios que se destacan pero que no actúan de manera corporativa. Esta fragmentación es habitual, y es uno de los síntomas más difíciles de interpretar. No se piensa en función del cuerpo de la iglesia local, sino en función del ministerio. Este trae dos complejos:
Complejo de inferioridad (había quienes cumplían la función de pie, pero querían ser manos y por esa razón no se consideraban parte del cuerpo). Es la sensación que determinados dones son los reconocidos, son los necesarios, etc. Pensar de esa manera, no solo es tener un concepto muy bajo de nosotros sino también del Señor. Es lo mismo que decir al Señor, quien te salvó, que te dio dones que no encajan. ¡Es decirle que se equivocó!
Complejo de superioridad (el que cumplía la función de ojo le decía a la mano “no te necesito”). Es la sensación de autonomía e independencia espiritual. El egoísmo y soberbia hacen estragos en este sentido. ¿De qué sirve un brazo hipertrofiado, que se enfoca solo en hacer pesas y no puede llevar la cuchara a la boca para alimentar el cuerpo? Un miembro así ha perdido la razón de existir, se enfocó en sí mismo y no en el cuerpo.
¡Hay que quitar la competencia entre los ministerios! ¿Nos pasa en nuestra congregación? Examinemos nuestros ministerios y preguntémonos si cumplen con la visión que tiene la iglesia, si el ministerio está haciendo crecer a otro ministerio, o ayuda a la iglesia a ser más fuerte. No se trata de ocupar un lugar, de poseer o producir, se trata de instrumentos que dan y sirven solo a Cristo.
(HAG)
sᴇʀᴠɪʀ ᴀ ᴄʀɪsᴛᴏ (ᴍɪɢᴅᴀʟɪᴀ ʀɪᴠeʀᴀ)
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